Las condiciones para este segundo golpe contra el chavismo, hay que buscarlas, esencialmente, en tres vertientes: el abandono de Maduro del proceso de liberación nacional, al pactar con la burguesía venezolana; la gigantesca corrupción, producto del nepotismo y los compadrazgos con militares y civiles del entorno; finalmente, la improvisación, en el área de la economía, con una ausencia impresionante de planificación y eficiencia; todo esto hace que la burguesía financiera crea que ha llegado el momento de recurrir al golpe, en este primer semestre del 2016.

Pese a que este segmento de la burguesía financiera ha obtenido las más grandes ganancias, durante los 17 años del chavismo, piensan que deben ir por la tajada mayor: PDVSA, la faja petrolífera, que en un cuarenta por ciento, es de los norteamericanos, los rusos y los chinos. Entonces, dicen: ¿ Por qué no compartir con estos tres gigantes capitalistas el resto del país? Hay por ahí otras "minucias" que también están en el inventario de los golpistas: Cantv, Sidor, la banca pública y paremos de contar.

Por su parte, los banqueros tuvieron que buscar unas muletas políticas y las encontraron en Acción Democrática, Primero Justicia, Voluntad Popular y un Nuevo Tiempo, que cuentan con unos ciento nueve diputados en la Asamblea Nacional, un verdadero batallón de aventureros para sustituir a la boliburguesía.

Entremos ahora a ver los más recientes acontecimientos que vienen ocurriendo, desde el 06 de diciembre hasta el día de hoy. Henry Ramos Allup, le fijó fecha de salida a Maduro para la primera semana de julio del 2016, pero el doce de febrero de este año manifestó que la salida sería mucho antes. Qué quiso decir con esto, el secretario General vitalicio de AD?. Bueno, que le importaba un carajo los caminos que indica la Constitución para una eventual salida del presidente Maduro. Porque no hay tiempo para un revocatorio o una constituyente antes de julio del 2016, más claro no canta un gallo golpista.

El economista Guerra, de Primero Justicia, ha venido diciendo que hay que salir de Maduro. Julio Borges, el abogado de medio pelo, está acostumbrado a pedir la renuncia de presidentes: en el 2002 pidió la renuncia de Chávez, de los ministros, de la corte, y todo aquello que oliera a chavismo; ahora, en el 2016 también quiere cambio ya en Miraflores. Los eunucos políticos de Un Nuevo Tiempo, se anotaron con todas sus armas en la aventura golpista, por aquello de que "agarrando manque sea fallo". Voluntad Popular no quiere que Leopoldo siga preso y que María Corina ande por ahí como " el ánima sola", por lo tanto, no aguantaron dos pedidas para decirle a los banqueros, "tiremos la parada", ¿Qué estamos esperando?.

Ahora lo que falta es que Obama fije hora y fecha en el calendario para subir hasta la avenida Urdaneta, y seguir hasta Miraflores y sólo esperar que llegue Monseñor Porras acompañado por el Cardenal valenciano, para echarle el agua bendita al retrato "clásico" de Bolívar y mandar para el aseo urbano el retrato amulatado del Libertador, Que día será eso? Yo no lo sé, pero pregúntenle a los banqueros, grandes ligas o a los militares de cuatro soles que están en la movida, porque golpe de estado, sin militares, no es posible en América Latina.

La Cuarta Flota del Atlántico está calentando los motores de sus portaaviones, por si los "batalladores" del Polo Patriótico se envalentonan y deciden pelear. Yo no creo que lo hagan porque el PCV está deslindando, confrontando y no sé qué otra vaina más, que nadie sabe en qué vaina andan. El PSUV, sigue formando comisiones, nombrando caciques regionales, y no creo que hoy puedan salir a la calle a defender a Maduro, Además casi toda la dirigencia del PSUV tiene como consigna central "si hay muchos golpistas en la calle, nos quedamos enconchados observando, si hay pocos golpistas seguimos observando, y si no hay nadie en las calles plomo y pa´ dentro.

Los marxistas venezolanos y la gente de izquierda, a la que nos duele este país, no vamos a rifarnos el pellejo por Maduro, estaremos, como siempre, al lado del pueblo, de la clase obrera, de los campesinos, atravesando el desierto y llevando coñazo de la pervertida clase media, que la jode la burguesía, pero siguen allí, esperando que algún día la tomen en cuenta para darles una aduana o un negocio lucrativo.

El miércoles de ceniza comenzó la cuenta regresiva para la llegada de la Semana Santa que será en cuarenta días. Uno entonces se pregunta: el golpe será, antes o después, del domingo de Ramos, mientras tanto, los fascistas se preparan para ponerle corona de espina a todo comunista que consigan en la calle. Coño, una vez más, los revisionistas kruschevianos pusieron la cagada.