El ministro de salud de Chile, Jaime Manalich, anunció el miércoles una cuarentena general para el Gran Santiago para frenar un fuerte resurgimiento de los casos de la pandemia en la capital.
"El mes de mayo está resultando muy duro para nuestro país", dijo Manalich, quien informó que 2,660 nuevos casos del virus se registraron en el país durante las últimas 24 horas, un 60 por ciento más que el día anterior.
El ministro dijo que las "nuevas medidas extraordinarias y duras", que entrarán en vigencia el viernes, son necesarias para reducir la tasa de contagio. También anunció una cuarentena a nivel nacional para todas las personas mayores de 75 años.
Chile tiene ahora 34,381 casos confirmados en total, 14,865 víctimas recuperadas y 347 muertes.
Santiago tiene una población de aproximadamente 6.5 millones de personas. La cuarentena total allí y en las ciudades satélites circundantes se produce en medio de un resurgimiento en los casos en las zonas más ricas del este de la ciudad, donde la enfermedad se identificó por primera vez entre las personas que regresan de viajes a Italia y Asia.
Manalich pidió a los ciudadanos que se unan y tomen las medidas en serio, y denuncien a cualquiera que no use máscaras u observe el distanciamiento social.
"En realidad, la batalla por Santiago es la batalla crucial en la guerra contra la pandemia", dijo Manalich.
Se han realizado unas 313,750 pruebas de coronavirus en la población de 18 millones de personas.
Cuando se le preguntó sobre las afirmaciones de que algunos hospitales públicos estaban cerca del colapso, insistió en que los pacientes y los recursos médicos ya habían sido transferidos para evitar abrumadoras áreas particulares.
"No tememos un colapso, pero en el caso de que estas acciones estemos trabajando y se respeten", dijo. "Necesitamos el compromiso de todos los ciudadanos, comprender lo que está en juego aquí y respetar todas las medidas para no enfrentar un colapso en el sistema debido a un aumento vertiginoso en los casos".