El
reto de la dinámica social exige desactivar el cúmulo de tensión,
haciendo que las alcaldías funcionen, los gobiernos estadales hagan lo
propio, los ministros, viceministros y jefes de las instituciones
descentralizadas y desconcentradas ponga el oído en el corazón del
pueblo
DE NUEVO EL MISMO GUION
El
guión ha variado poco, solo pudiéramos agregarle la aplicación a los
conflictos sociales actuales la intervención transnacional con las
nuevas tecnologías o redes sociales y los avances tecnológicos militares
de la OTAN. Hoy, lo que sucede en Libia, sin llegar a los extremos de
una guerra civil, ya lo habíamos vivido en Venezuela el 11 de abril del
año 2002 y no dudamos que con miras a las elecciones del 2012 -al
cumplirse una década de ese hecho histórico venezolano-, el rodaje de
ese guión ya pudo haber comenzado por parte de la oposición y sus
tentáculos internacionales.
Renuncia gubernamental… el guión se repite
Habíamos
escrito en un artículo anterior que el problema de la seguridad interna
en los gobiernos, como por ejemplo el mal funcionamiento de los
servicios de inteligencia, radica en no estar en contacto directa a
diario con el pueblo, sin poner el oído en la tierra para escuchar el
palpitar de su corazón y ver como están los movimientos del sístole y el
diástole para luego ver qué tratamiento se puede aplicar para evitar el
infarto o el paro cardiaco. Resultó sumamente sorprendente que de la
noche a la mañana estallara el conflicto en Libia. Y mas allá de
cualquier observación crítica a Muamar Gadafi, quien fuera en el año
2009, presidente de la Unión Africana y coronado rey de reyes por los
reinados tradicionales africanos, presidente de la próxima Cumbre
África-America del Sur, se le escapó de las manos un conflicto cuya onda
expansiva provino de Túnez y Egipto. Su sistema de seguridad interna
falló… ¿y por qué falló? La clave estuvo en la ultra confianza de los
cuadros estratégicos del proceso libio así como de sus representantes en
organismos internacionales y del servicio exterior, en que nada
pasaría. Tal vez Gadafi, ocupado en los problemas mundiales, fue
descuidando su contrainteligencia interna y es así como el ex jefe de
inteligencia y también ministro de Relaciones Exteriores, Musa Kusa, así
como Ali Treki, el ministro de Justicia y su representante en la ONU,
sus embajadores en Australia, Bangladesh, China, Francia, India,
Indonesia, Jordania y Suecia, saltaron la talanquera. Se creó un Consejo
Nacional Libio para la Transición legitimado por los países europeos,
los mismos que se repartieron África en la Conferencia de Berlín en
1884.
Algo similar pasó aquí.
Mañana
(lunes 11 de abril) se cumplen nueve años, cuando precedido de un paro
indefinido organizado por la CTV y Fedecámaras, así como el inicio de un
proceso de aplicación de la Constitución de la República Bolivariana de
Venezuela con la implementación de la Ley Habilitante, se fue creando
un clima para allanar el camino hacia el golpe de Estado del 11 de abril
del año 2002. Una gran marcha que tenía un objetivo aparentemente
claro, fue desviada hacia el palacio de Miraflores para exigir la
renuncia del presidente Chávez. El entorno de “ultraconfianza” del
presidente Chávez comienza a sacar las garras. Se pronuncia el
comandante general del Ejército, general Efraín Vázquez, quien desconoce
la autoridad del presidente Chávez, le sigue el vicealmirante Héctor
Ramírez Pérez. Todos ellos asesorados por el agregado militar de la
embajada de Estados Unidos en Venezuela, el teniente coronel James
Rodger. Luego seguiría el sistema de inteligencia, entre los cuales
estaba el general Camacho Kairuz, el viceministro del Interior y los
directores del DIM y de la DISIP.
Siguió el desfile de los
confianzudos como el ministro de Finanza, general de brigada Francisco
Usón y después cerraría con broche de oro en horas de la noche el ataque
como macagua envenenada contra Chávez, el señor Luis Miquilena, ex
ministro de Justicia y del Interior, una especie del libio Musa Kusa. Es
bueno destacar que ya desde enero de ese año se había creado la Oficina
para la Iniciativa de la Transición, directamente concertada con la
sociedad civil antichavista donde muchos recibieron dinero ensangrentado
del departamento de Estado a través de USAID, brazo ejecutor civil de
la CIA alrrededor del mundo y que hoy está apoyando la Cumbre
Afrodescendientes en Honduras.
“Ojo pelao” pa’l 2012
Los
indicadores de conflictos sociales han aumentado en Venezuela, así como
factores internos de desestabilización, como el mismo Presidente dijera
recientemente, se debe luchar contra cualquier flagelo de corrupción
“caiga quien caiga”. La acumulación de conflictos cada día van tomando
formas nuevas de expresión, desde coserse la boca hasta las
informaciones distorsionadas en medios de comunicación privadas
nacionales, en consonancia con la campaña mediática internacional para
ir creando un clima de zozobra contra Venezuela. Hará falta revisar,
esto lo digo con toda responsabilidad, el sistema de seguridad y de
inteligencia de Venezuela ante el incremento de la inseguridad en el
país que hoy llega hasta nuestras comunidades rurales y que pareciera
escaparse de las manos a los organismos del Estado. El reto de la
dinámica social exige desactivar el cúmulo de tensión, haciendo que las
alcaldías funcionen, los gobiernos estadales hagan lo propio, los
ministros, viceministros y jefes de las instituciones descentralizadas y
desconcentradas ponga el oído en el corazón del pueblo. Hay que
insistir que las cosas funcionen como deben ser. No hay tiempo que
perder o el cerco seguirá aumentando y el objetivo del enemigo es
clarito: Elecciones del 2012.
TIPS BARLOVENTEÑO
No
se si será por racismo institucional, pero el Ministerio de Cultura
sigue insistiendo que la Casa de África, decretada por el presidente
Chávez fue asignada para su ejecución al entonces ministro Farruco era
su responsabilidad, después la pasó al ex ministro Soto y ahora se lavan
las manos como Pilatos. ¿Y qué dice el alcalde de Caucagua, Juan
Aponte, a todas estas?
-----Las dos únicas infraestructuras
construidas por el Gobierno Bolivariano para los afrodescendientes, el
Centro Cultural Andresote y el Centro de Estudios de Barlovento (CEIBA)
lo han dejado a su completo abandono mientras que para las “bellas
artes” y las orquesta de música clásica europea, el apoyo en recurso no
escatima esfuerzo… ¿cómo se llama eso?
---El año internacional afrodescendiente está en entredicho por
haber sido decretada por la ONU, organismo que aprobó la resolución de
ensangrentar al pueblo Libio y ahora a Costa de Marfil. Pero será
necesario realizar una Cumbre afro en Venezuela como respuesta a estos
atropellos y la inclusión definitiva de los afro en las políticas
públicas con miras a la construcción del socialismo del siglo XXI. Me
llegan informaciones de que se montó un comité venezolano con una agenda
que no tiene ni pie ni cabeza… mosca pues sus operadores no saben donde
están parados sobre esta temática.
jesuschuchogarcia@hotmail.com