6 de abril de 2014.- "No me voy a sentar en una mesa con fascistas, sépalo Venezuela y el mundo. Me sentaré con la oposición política", sentenció el presidente de la República, Nicolás Maduro, durante la jornada del Gobierno de Calle, desarrollada en Nueva Esparta.
Acto seguido, el mandatario fustigó: "¿No les parece extraño que yo tenga 8 semanas haciéndole un llamado al diálogo a la MUD y ellos se hagan los sordos? Ellos no apuestan al dialogo sino a la violencia".
“Yo he estado tentado a ponerles fecha y hora (a la dirigencia opositora) y pararme en la puerta de Miraflores para ver que excusa van a dar. Estoy tentado, estoy pensándolo, para que venga una delegación de la MUD”, mencionó el Jefe de Estado.
Aseguró que la referida tolda política ha rechazado cualquier posibilidad de diálogo, dado que -según dijo- esperan que el país entre en "un caos de violencia" para "sentarse a gobernar" y, luego de esto, salir "con la carta de salvación".
“Ellos juegan a las dos aguas, se quedan quietos para ver si todo se daña y después salir con su carta salvadora”, aseveró.