Noviembre 30 de 2013.- En este encuentro histórico que se desarrolló en el marco del 8vo Encuentro del Día Nacional de la Semilla Campesina y 2do Internacional, en Monte Carmelo, Municipio Andrés Eloy Blanco del estado Lara, celebrado el 28 y 29 de octubre, se debatieron aspectos importantes que tendrán un efecto contundente en nuestra soberanía alimentaria , pues de allí surgieron propuestas para la construcción de una nueva Ley de Semillas que nos blinde contra los transgénicos, semillas modificadas, agrotóxicos y toda forma que quiera controlar la producción alimentaria y nuestra soberanía, por medio de paquetes biotecnológicos que están contribuyendo a la extinción de especies del reino animal y vegetal, coadyuvadoras de la cadena natural de producción de vida en La Tierra.
Y es que el problema del control alimentario pasa por una guerra soterrada entre empresas transnacionales, como la monstruosa Monsanto emblema del imperialismo mundial, contra los campesinos y agricultores, que tienen a sus espaldas la milenaria tradición de la siembra de semillas, gracias a los métodos tradicionales de cultivo que se han transmitido de generación en generación.
Ante esas graves amenazas, surgen cada día más voces que advierten sobre los daños irreversibles que podrían generar estas prácticas de la moderna agroindustria para la sobrevivencia humana, un planeta infestado de transgénicos, en donde los campesinos pudieran ser convertidos en facciones subversivas, perseguidos y acosados por querer cultivar las escasas semillas naturales, orgánicas y tradicionales.
No muy lejos estamos, de esa fuga del imaginario apocalíptico, pues ya existen miles de hectáreas en Brasil, Argentina y Uruguay, que se han convertido en, tal vez, el laboratorio de soya transgénica, más grande del mundo, en países vecinos, supuestamente “progresistas”, en los cuales, las transnacionales de la muerte ya han alcanzado parte de sus metas. A través de estos países, salen miles de productos derivados de soya transgénica que sirve de alimento a aves y reses que luego consumimos y de aceite comestible que no informan en sus etiquetas con que tipo de soya fueron producidos.
Los campesinos unidos a los colectivos asumen esta bandera de lucha, para desmontar una conspiración muy compleja diseñada por las transnacionales de la alimentación moderna, conspiración disfrazada de productividad en el campo de la alimentación y cuyo objetivo final es tomar el control biotecnológico de la semilla, embrión de vida y de soberanía tanto del campesino, del agricultor, como del ser humano con su identidad y carga cultural. Ahora, no sólo se trata de conquistar con armamentos, guerras, drogas y penetración cultural, sino también, con lo más básico: el alimento humano.
Plenaria y Declaratoria del 8vo Encuentro del Día Nacional y 2do Internacional de la Semilla Campesina
En esta Plenaria, posterior al debate para la construcción de esta Ley de Semillas, se comenzaron a definir los principios, cuyo paradigma se encausa sobre la defensa inextricable de los derechos del cultivo libre de las semillas indígenas y campesinas las cuales se han venido sembrando a través de la historia sin ningún tipo de dominio, así mismo, se plantea el rescate y protección de estas semillas por ser un patrimonio natural y cultural, no solo local, sino de toda la humanidad.
Exposición de las propuestas para la Declaratoria de este Encuentro Credito: aporrea tvi |
Ante las amenazas visibles e imperceptibles, varios participantes señalaron la importancia de que este instrumento legal sea discutido por todo el pueblo, desde lo más profundo de las bases. Que se haga un gran debate constituyente con esta ley. Que debe ser revolucionaria, ecosocialista, participativa y en contra de los enemigos que patrocinan nuevos métodos de sometimiento e injerencia de los pueblos, por medio de la invasión de biotecnología postmoderna de los “países desarrollados”.
Por dos días discutieron los principios que deben regir esta Ley de Semillas Credito: aporrea tvi |
Para hacer más patente esta lucha, durante este Encuentro, en Portuguesa se realizaba simultaneamente un congreso de Malezas dirigido a los agricultores, organizado por la Sociedad Venezolana para el Combate de Malezas-SOVECOM, entre los cuales tenía como patrocinadores: MONSANTO, Bayer, Agropatria, Ronstar, Basf , Dow Chemical Company de Venezuela, ANCA, entre otras y de organizadores: Ministerio para el Poder Popular de Agricultura y Tierras, Universidad Central de Venezuela (UCV), Universidad del Zulia (LUZ), Universidad Experimental del Táchira (UNET), Fundación Nacional del Arroz, Fundación DANAC. Un hecho paradójico, cuando hablamos de deberes socialistas, dentro de un estado socialista, que sigue los lineamientos del Legado de Chávez dentro del espíritu del Plan de la Patria.
Para culminar se hizo la declaratoria final que orientará a la estructuración del trabajo de construcción y redacción en colectivo de este instrumento legal, desde las bases, asentamientos campesinos, comunas, movimientos sociales, universidades, consejos comunales y a todos los entes comprometidos con el avance de la Revolución Bolivariana, con el acompañamiento de la Asamblea Nacional y los distintos organismos relacionados con este tema.
Congreso para el Combate de Malezas donde se promueve el uso de agrotóxicos