Rafael Ramírez y Tareck El Aissami son idénticos, como dos gotas de agua, al segundo lo cogió la tarde, no dio el salto cuando tuvo su oportunidad en 2015, cuando estallaron las amenazas directas del Decreto de Obama. Ambos montaron sus propias mafias para desfalcar al Estado, con profusos enlaces con centros financieros tanto dentro como fuera del país. Ambos se mostraban radicalmente revolucionarios con sus enormes caretas de "chavistas". Ambos comenzaron a contactar la derecha del grupo de Leopoldo López, lo que el Toby no quiere que se revele porque lo aterra, lo enferma, le provoca pánico. Está plenamente comprobado que don Rafael Ramírez prestó apoyo financiero a Guaidó y su grupo, y eso se ha ventilado lo suficiente.

Tareck El Aissami para poder huir, tenía primero que resolver muchas cuentas pendientes con los agentes gringos que le seguían los pasos (como lo hicieron con Baduel), quienes cada vez le aumentaban los poderosos cargos para ir reventándolo, quebrándolo. De hecho, las "SANCIONES SÍ FUNCIONAN" (como pregona doña María Corina), porque Tareck estaba cagado, como en su momento lo estuvo don Rafael Ramírez quien entrego contactos, cuentas y todo tipo de bagajes secretos a la CIA. Muchos de los compinches de Tareck, comenzaron a preparar el salto a partir de 2018, cuando los terrenos se les estaba complicando por no dar muestras de colaborar con las exigentes acciones terroristas que se le pedían. Samark confiesa a su jefe Julio Borges que requería tener un poco más de tiempo. Lo único que de momento hacía Tareck y su gente para que los gringos fueran teniendo confianza en él seguir implosionando nuestra economía. Era seguir robando a diestra y siniestra: estafando, haciéndole previamente un gran trabajo a los gringos para que en el momento en que éstos decidieran invadirnos, encontrar tierra arrasada a su paso. Tareck pedía a gritos un respiro, tiempo para demostrar que podía recibir el beneplácito, el perdón de los gringos (tal cual lo revela Julio Borges en sus conversaciones con Samark).

Los lobbies que debía trabajar Tareck se les estaban enredando, porque sobre él pesaban severas sanciones de vieja data (que incluían sus supuestas conexiones con el narcotráfico y el invento de ser miembro del grupo terrorista Hezbolá), lo que a la vez lo hacía más apetecible para Washington (como lo revela el propio Samark López en sus explicaciones a Leopoldo López). Al mismo tiempo uno de los suyos, otro pez gordo, el ex magistrado Cristian Zerpa, abogaba sin descanso por él desde Miami.

Tareck requería más tiempo del que dispuso don Rafael Ramírez para huir. Necesitaba más tiempo este ex ministro de PDVSA del presidente Maduro, no sólo para irse forrado sino ir también ganándose alguna forma de protección por parte de los gringos. Pero los pasos se venían dando. Lo que pasa es, insistimos, a Tareck lo cogió la tarde…. No hizo las gestiones a tiempo para coger a Italia, Turquía o al mismo Norte…

Lo que se le ha encontrado del escandalazo de la banda PDVSA-CRIPTO es lo mismo que desde hace año se ha venido denunciando contra los equipos de ladrones dejado en la industria petrolera por el jeque Rafael Ramírez. El Toby me ataca por mampuesto utilizando al tal Evencio Barboza. Al Toby le da mucho escozor y repeluco responderme directamente, porque sabe de la metralla que dispongo, de la cual no he utilizado ni un solo cartucho.

¿Qué diferencia puede haber, insisto, entre Rafael Ramírez y Tareck El Aissami en todo este entramado y espantoso desfalco a la Nación? Pues, ninguno, señor Alter Ego del Tobi, don Evencio Baboza: andaban ambos encaletados dentro de la industria petrolera (la más codiciada en el mundo por Estados Unidos), haciendo la una y mil argucias para buscar un armisticio con los gringos. Se sabían sancionados por el imperio, y entonces procuraron conexiones de todo tipo a través de tercerones, con agentes cercanos a la derecha, para ir buscando el perdón a las condenas gringas, al tiempo que la posibilidad de ser protegidos al momento de ellos coger las de Villa Diego.

El punto de conexión con los gringos, lo encontró Tareck El Aissami con Samark López, mientras que Rafael Ramírez lo consiguió a través del gran lagarto de Leopoldo López, y por eso llegó mucho más lejos, en sus propósitos. O acaso usted, cree, señor Evencio Baboza, que esa huida, esa escapada a Italia (donde gobierna una hija predilecta de los ideales de Mussolini) es de gratis. Qué le parece, que han cogido a multitud de estafadores de PDVSA en Europa, hasta al primo de don Rafael, ¡y a él, al jeque superior de los más grandes desfalcos, no lo tocan ni con un suspiro de una monja!

Los hechos recientes como los relacionados con la banda PDVSA-CRPTO, pocas veces se ven destapados en un gobierno, porque éstos tienden a ocultar sus cloacas, sobre todo en occidente. Por lo general en los gobiernos de occidente estos grandes robos de sus carcamanes los ocultan y los enredan para evitar los escandalazos y cuidar eso que llaman "la probidad" de sus altos funcionarios. En esta severa investigación de la Fiscalía han caído ministros, viceministros, diputados, altos gerentes de las industrias básicas, personajes que estuvieron en Miraflores al lado de Chávez y Maduro, altos oficiales de las Fuerzas Armadas y empresarios. Y ocurre en un año electoral, además, a pocos meses de que decidamos quién será el próximo presidente de nuestro país.

Y se ve que la oposición no celebra en absoluto estas contundentes acciones profilácticas de la revolución. Calla y otorga, con su vil silencio. La oposición radical procura hacer una guasa de esta trama, cuyas redes tienen fuerte conexión con los planes gringos para tumbar el gobierno, en el que se ha puesto al descubierto enlaces con el Departamento de Estado, con Leopoldo López, Julio Borges, Carlos De Veccio y Óscar Ocariz.

Me asomo a los últimos acontecimientos y me reconfirman que nadie está seguro en su pedestal en esta revolución. Aquellos que han creído y creen que tienen a Dios cogido por las barbas, que vayan poniendo las suyas en remojo.

Pero la gente (ciertos políticos de partido) no escarmientan ante lo que se está produciendo, seguirán dominados por las luces del vil negocio, de cochino capital, aparentando ser chavistas, y continuar en sus papeles de sinvergüenzas y traidores.

Por allí, pues, alguien aludido sale a atacarme diciendo que yo estaba equivocado, que no era Rafael Ramírez quien se comunicaba con Leopoldo López, sino un alto funcionario de confianza del gobierno, el señor Tareck El Aissami. Simplemente le contesto, que los dos, los dos se han comunicado con el cantinflérico opositor del Barrio de Salamanca. Una cosa no niega la otra, sino todo lo contrario, lo reconfirma. Con la diferencia de que Rafael Ramírez goza de los aires mediterráneos en un palacio de los césares de Roma, comiendo de lo fino y de lo caro, protegido por el Parlamento Europeo (Guardias de Corps de Macrón), y al otro topo no le dieron tiempo de escapar (El Aissami) y lo cogieron embarrado desde los huevos hasta el pescuezo.